Art Concept de la película "La granja de los malditos" |
Alejandro es psicólogo, seguidor de las teorías de Freud y de las definiciones insuficientes de la sinceridad. Opina que la diferencia entre lo que sus pacientes dicen y lo que creen nada tiene que ver con la honradez, o la voluntad de mentir. Aspectos que controlan los hilos ocultos del inconsciente. Enredado en la interpretación de los deseos reprimidos, las pesadillas intricadas y las mentiras piadosas, se ha perdido en un ovillo sin desentrañar.
Así, la teoría de Freud sobre la disparidad entre los motivos reales que explican las acciones de sus pacientes y las que ellos justifican en una operación de racionalización, nuestro psicólogo la desfiguró transformándola en un mal remedo del televisivo doctor House con su famoso “todos mienten”.
Cómo manejar con tantas lagunas una situación en que todos dicen ver seres irreales, donde muchos se sienten contagiados de enfermedades inverosímiles. El solucionador de problemas se convierte en la mayor de las complicaciones. ¿Tal vez?